La pitaia, también conocida como fruta del dragón, es una planta de la familia de las cactáceas que ha sido aclamada por sus propiedades únicas y su capacidad de adaptación a climas áridos. Originaria de América Central y América del Sur, esta planta ha sido cultivada en el Algarve y en Portugal durante muchos años, pero ha sido recientemente cuando ha ganado popularidad como una fruta de producción comercial.
En una entrevista con la agencia Lusa, el profesor de la Universidad del Algarve, Amílcar Duarte, destacó la importancia de la pitaia en la región. “Es una planta que sabe cómo ahorrar agua, lo cual es crucial en el Algarve, y ha estado presente en nuestra región y en Portugal durante muchos años, aunque su cultivo comercial es relativamente nuevo”, dijo.
La pitaia es una planta que se adapta perfectamente a las condiciones climáticas del Algarve, con veranos calurosos y secos y suelos pobres en nutrientes. Su capacidad de retener agua en sus tallos y hojas le permite sobrevivir en estas condiciones extremas, lo que la convierte en una opción ideal para los agricultores locales.
Además de su resistencia al clima, la pitaia también es conocida por sus propiedades nutricionales. Es una excelente fuente de fibra, vitamina C y antioxidantes, lo que la convierte en una fruta ideal para una dieta saludable. Su sabor dulce y refrescante la hace popular entre los consumidores y su apariencia única, con su piel roja o amarilla y su interior blanco salpicado de pequeñas semillas negras, la hace atractiva para la vista.
El cultivo de la pitaia en el Algarve ha sido una bendición para los agricultores locales, ya que les ha permitido diversificar sus cultivos y obtener una fuente adicional de ingresos. Además, su cultivo requiere menos agua y fertilizantes en comparación con otros cultivos, lo que lo convierte en una opción sostenible y respetuosa con el medio ambiente.
La pitaia también ha sido una oportunidad para el turismo en la región. Muchas granjas ofrecen visitas guiadas y degustaciones de la fruta, lo que permite a los turistas conocer más sobre esta planta y su cultivo, y al mismo tiempo apoyar a los agricultores locales.
Pero no solo en el Algarve ha tenido éxito el cultivo de la pitaia, también en otras regiones de Portugal como Madeira y los Açores. Esto ha permitido que la fruta sea más accesible para los consumidores en todo el país y ha ayudado a promover su consumo.
Sin embargo, a pesar de su creciente popularidad, la pitaia sigue siendo una fruta poco conocida en comparación con otras como la fresa o la piña. Por esta razón, es importante seguir promoviendo su cultivo y consumo para aprovechar al máximo sus beneficios.
En resumen, la pitaia es una planta que ha demostrado su valía en el Algarve y en Portugal, no solo por su capacidad de adaptación al clima y su valor nutricional, sino también por su impacto positivo en la economía local y el turismo. Esperamos que su cultivo continúe prosperando y que más personas puedan disfrutar de esta deliciosa y saludable fruta del dragón.