El reto de hoy en día es el de reconocer las tendencias demográficas de la población y preparar a los países para afrontarlas. Es importante mantener el enfoque en las personas y no centrarse únicamente en los números. Esta fue la opinión de Mónica Ferro, directora del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) en Londres, durante la Cumbre Anual de Forbes de 2023: Empoderar el Futuro.
Según las estadísticas de la ONU, se estima que la población mundial aumentará a 9 mil 800 millones para 2050 y 11 mil millones para 2100, lo que plantea un desafío importante para muchos países. Esto se debe en parte al creciente número de mujeres en el mundo; la mitad de la población mundial está compuesta por mujeres, sin embargo, a menudo se enfrentan a más obstáculos en comparación con los hombres.
Las mujeres son las principales damnificadas cuando los gobiernos no se centran en las personas, gracias a la discriminación de género y los derechos humanos que no son respetados. Esto significa que muchas mujeres enfrentan una falta de atención y beneficios, al igual que los recursos para sus familias.
Es importante garantizar que los gobiernos puedan proporcionar herramientas y recursos para ayudar a las mujeres a alcanzar la igualdad, y a las familias a proporcionar una vida digna. Existen varios programas de ONU, como el Fondo de Población, que trabajan para garantizar los derechos humanos de todos y especialmente los de las mujeres, así como mejorar su salud, educación, empleo y bienestar.
Además, el acceso a la educación debe mejorarse para las mujeres, no solo para mejorar su nivel de vida sino también para promover la igualdad de género. El estudio de los derechos de las mujeres también es una prioridad, para asegurar sus derechos a una vida libre de violencia y discriminación, así como proporcionarles acceso a los servicios de salud y la seguridad social.
Uno de los mayores desafíos que deben enfrentar los países es el de proporcionar una infraestructura adecuada para poder responder a los cambios demográficos. Esto incluye la creación de leyes y políticas que aborden los problemas que enfrentan las mujeres, como el empoderamiento económico y la igualdad de género.
El objetivo es dar a las mujeres el control de su vida y de los recursos de su familia, así como asegurar que sean parte integral de la toma de decisiones en todos los niveles de la sociedad. Esto es esencial para un futuro demográfico equilibrado y sostenible para todos.
Las Naciones Unidas y la comunidad internacional deben unirse para encontrar solucion